jueves, enero 12, 2012

ROBERT CAPA EL HOMBRE Y EL MITO VII

Foto de Robert Capa tomada en Italia 1944

UNA BIOGRAFÍA PARA EL CINE

Por Richard Whalen

El talento de Capa para narrar historias y su actitud alegre frente a la realidad en ningún sitio se hacen tan evidentes como en sus memorias de la II Guerra Mundial que llevan por título “SLIGHTLY OUT OF FOCUS” (Ligeramente desenfocado). El libro se ha convertido en un clásico y es generalmente aceptado como fuente biográfica fidedigna, si bien los lectores deben tener presente que Capa lo escribió con la intención específica de venderlo al cine. En realidad, se preocupó más de contar una historia entretenida y de acción que de exponer una relación meticulosamente exacta de los hechos. En realidad, en ningún momento afirmó que el libro contara toda la verdad y nada más que la verdad. En la solapa del libro declaraba: “Como resulta tan difícil contar la verdad, me he permitido -en interés de todos- quedarme algunas veces a un lado de la frontera, y otras pasarla. Todos los hechos y las personas que aparecen en este libro son imaginarios y tienen siempre que ver con la verdad”. Pero, desde entonces, la mayoría de los ejemplares han perdido la cubierta y la gente ha olvidado la advertencia.

En su descripción de la invasión de Sicilia, Capa se tomó algunas de las libertades de que habla en relación con los hechos reales. Afirma en ella que la primera noche de la invasión, 9 de julio, acompañó a los paracaidistas que iban en avión, los fotografió mientras saltaban sobre Sicilia y después regresó con el avión a la base aérea del norte de África para revelar y enviar las fotografías. Dado que los paracaidistas tomaron tierra antes que las tropas anfibias, sus fotografías deberían haber mostrado el inicio de la invasión. En cambio, la leyenda que acompañaba las mejores fotos de Capa cuando el ejército la trasmitió a los Estados Unidos nos lleva a la conclusión de que no fueron tomadas hasta dos noches más tarde, dado que identifica al teniente coronel Charles Kouns, que era el oficial que estaba al mando del tercer batallón del 504 regimiento de paracaidistas de infantería. Es un hecho que el regimiento 504 saltó la noche del 11 de julio al objeto de reforzar las tropas que luchaban en las proximidades de Gela.

Fuente: Revista Foto Profesional nº 40 - abril de 1986